Práctica Nº5.

 

Buenas buenas!

Hoy abrimos esta entrada para diferenciar las figuras de Coach educativo, tutor, orientador, asesor e influencer. 

Coach educativo:

El coaching mejora el autoconocimiento, la comunicación y el liderazgo dentro de las aulas, optimiza la actividad personal y de equipos y prepara al alumno a gestionar los conflictos dentro del aula.

“Coaching” significa trabajar desde el otro, no trabajar desde la instrucción o desde el marco teórico del profesor, sino que significa trabajar con los recursos que el alumno lleva a clase, intentando construir ese marco teórico a través de ese proceso constructivo y vivencial, convirtiendo las posibilidades en hechos y acciones a través de unas clases más vivenciales, más prácticas y más constructivas, dando como resultado mejores notas, mejor rendimiento, más satisfacción y más capacidad para gestionar los conflictos.

 

Tutor:

Responsable de tutelar a un grupo mediante tutorías, consideradas éstas como una estrategia para la atención de la grupalidad en las instituciones educativas. Las tutorías podrían pensarse como roles cuya misión sea la de intervenir en las formaciones de subjetividad. La violencia escolar, el maltrato institucional, la exclusión, la marginación, la expulsión del sistema, la competitividad, los problemas de comunicación entre los distintos actores son formadores de subjetividad.

Principales funciones del tutor:

• Ser nexo entre los demás docentes que tienen a cargo el mismo grupo de alumnos.
• Realizar un seguimiento personalizado de los alumnos (detectar conflictos, procesos de fracaso escolar, etc.)
• Asistir la vinculación del conocimiento aprendido con las habilidades y experiencias individuales y grupales.
• Asistir a los alumnos a la elaboración de sus proyectos de vida 

Orientador:

La figura del orientador se ve como la persona que sirve de guía para la toma de decisiones que afectan al futuro del estudiante, como qué estudiar en la universidad. Pero realmente es una figura multidisciplinar, que ayuda tanto a padres, como a alumnos, como a profesores.

El orientador participa activamente en campañas de concienciación y responsabilidad con el estudio, y mantiene un contacto permanente con las familias y los alumnos, estudiando su situación personal y evaluando soluciones que beneficien principalmente a la estabilidad y equilibrio del menor. La labor del orientador se invierte como una acción preventiva, de cara a, por ejemplo, evitar el fracaso escolar, detectar las dificultades en el aprendizaje, contribuir a una mejora psicológica y afectivo-social del alumno y ayudando a las familias a redirigir la educación del menor en base a los principios y derechos de este hacia una educación en igualdad, justicia y protección, atendiendo a sus necesidades.

 

Asesor:

Vemos al asesor educativo como ese alguien que, oportunamente, brinda un consejo, una ayuda sicológica, un apoyo moral o simplemente una sugerencia que le permite sobrellevar la situación y evitarle mayores perjuicios personales o académicos al alumno, y de ser el caso, remitirlo a bienestar estudiantil, para que le brinden la ayuda profesional que sea necesaria. Por lo tanto, el asesor educativo es un ser humano que sabe de lo humano, para los humanos.

Se convierte también en un consejero oportuno, con experiencia y capacidad de entendimiento de muchas situaciones difíciles. Es un profesional, que por ese mismo hecho, goza de la solvencia cultural, moral y académica, que le permite asesorar, en debida forma, a un estudiante, en cualquier circunstancia de la vida estudiantil; porque conoce las normas legales y reglamentarias, propias de su quehacer como profesional.

El proceso de actuación inicia acordando la estrategia con el director indicando el papel que tendrán ambos ante el colectivo escolar para realizar el plan de mejora. Es importante presentar una propuesta de trabajo al colectivo; desde la elaboración del diagnóstico, mediante la revisión de fuentes de información y datos de la escuela, posteriormente al revisar y analizar la información se detecta la problemática escolar, hacen un plan de acción, lo ejecutan, le dan seguimiento a las acciones y evalúan sus logros, lo que puede llevan a un replanteamiento de acciones en caso de no haber alcanzado los resultados esperados.

 

Influencer:

Un influencer es aquella persona que destaca en alguna red social u otro canal de comunicación, que expresa opiniones o da información sobre algún tema en concreto que ejercen una gran influencia sobre muchas personas que le siguen.

Por ejemplo, en el ámbito estudiantil, hay algunas influencers que lo que hacen es enseñar estrategias de estudio, enseñan su rutina de estudio e incluso hacen directo para estudiar con sus seguidores mediante el método pomodoro.

 

Todos ellos pueden ayudar mucho al alumno ya sea dentro o fuera del aula. La verdad es que no entiendo del todo bien la diferencia entre asesor y orientador, imagino que el asesor solo da consejos a la gente que acuda a él, y el orientador también hace eso pero a su vez está pendiente de la gente que necesita ayuda pero que no la pide.

Yo quizás añadiría la figura del profesor de actividades extraescolares, ya que también me parece algo importante en el desarrollo de los jóvenes, ya sean extraescolares deportivas, que pueden inculcar disciplina y sociabilidad, como extraescolares de refuerzo de las asignaturas del colegio, como inglés o matemáticas.

Si yo, como profesora de música, tuviera que hacer un itinerario formativo, evidentemente haría dos bloques complementarios, uno de lenguaje musical básico, y otro de historia de la música. Las clases de lenguaje musical y teoría musical, a mí me gusta hacerlas al lado de un piano, porque no quiero que mi alumno sólo sepa hacer de cabeza una escala o un acorde, quiero que lo comprenda y lo pueda llevar a la práctica, por lo que le enseño sobre el papel la teoría de la escala pero acto seguido nos vamos al piano para hacer los ejercicios correspondientes. Respecto a la historia, recomiendo un montón un libro que me leí en primero de carrera y me encantó, llamado “Esto no estaba en mi libro de historia de la música”, es muy ameno e intercala la teoría y análisis de las obras más importantes con cotilleos de los compositores.